‘Más del 70% de La Paz está en riesgo y hay que trabajar en la prevención’

Bolivia Informa sobre La Paz

Desde junio del 2010, cuando aparecieron las primeras grietas en Cervecería, el Programa de Gestión de Riesgo y Adaptación al Cambio Climáticos (Oxfam GB) trabajó junto a la Alcaldía de La Paz en la planificación y prevención. Primero trazaron un plan para evacuar a 130 familias a los campamentos de Zenobio López y sector Escobar Uría. La magnitud de los daños del megadeslizamiento, tras la falla de Callapa que no estaba prevista, rebasaron los cálculos de los expertos.

— ¿Desde cuándo se diseñó el Programa de Prevención en las zonas del megadeslizamiento?

— La Alcaldía (de La Paz) monitoreaba desde junio las manifestaciones, (como la) aparición de grietas de 0,5 centímetros en Cervecería y Pampahasi Bajo. En diciembre (2010) la Alcaldía se acercó a nosotros para tomar decisiones conjuntas sobre prevención y evacuación, porque estas grietas aumentaban de tamaño mensualmente.

— ¿Qué zonas deslizadas se encontraban en riesgo desde diciembre?

— Las grietas, que significan un riesgo manifiesto, aumentaron su tamaño en diciembre a 5 centímetros de ancho. De las zonas deslizadas (que tenían este nivel) estaban en Cervecería, Metropolitana, Pampahasi Bajo, Kupini II y Valle de las Flores. Callapa no estaba considerada, porque lo que ocurrió en esa zona es lo que se llama el efecto colateral. Es como una onda expansiva que ha activado la falla geológica de Cotapata, como los cinturones de las placas tectónicas en los terremotos, y reactivó un deslizamiento de hace 60 años atrás.

— ¿Cuál era el plan que debía realizar entonces Oxfam GB con el municipio paceño?

— Teníamos dos albergues establecidos: Zenobio López y final Escobar Uría, con todos los servicios básicos, para 130 familias de las zonas afectadas, pero la reactivación de Callapa no estaba prevista y por eso el número de afectados sobrepasó lo que teníamos descrito en el plan. 

— Según las previsiones ¿cómo se debió actuar en el desastre?

— Cuando se determinó el desalojo de los vecinos, ellos no querían, pero la presencia de grietas se hacia evidente. Creímos que por las lluvias de diciembre y enero la gente se preocuparía y consideraría las medidas de prevención, pero esos meses no llovió tanto. En febrero empezó a llover torrencialmente y todos los días, y eso fue lo que detonó la alerta,  por eso la gente aceptó desocupar sus viviendas y visitaron los campamentos, pero el siguiente sábado (26 de febrero) ocurrió el megadeslizamiento.

— ¿Ahora qué planes se están trazando ante la potencialidad de riesgo que tienen la ciudad de La Paz?

— Con este hecho esperamos que todas las ciudades de Bolivia aprendan a valorar la prevención de los desastres naturales. Por ejemplo, toda la ciudad de La Paz fue construida sin planificación y más del 70% se encuentra en riesgo según el mapa de amenazas del municipio, pero nosotros estamos cruzando esa variable con la de vulnerabilidad para así determinar elementos están expuestos, como barrios, gente y comunidades posiblemente afectada por desastres.

La población de La Paz está en suelos inseguros, esto es lo que tenemos y ahora hay que ver la forma de corregir las normas de construcción, de asentamientos, de planificación y de prevención para evitar otros megadeslizamientos.

— ¿Cuánto tiempo tomará elaborar un mapa de amenazas y vulnerabilidad?

— Es un estudio que tomará un año para todo el municipio de La Paz. Es la Alcaldía que lo hace, nosotros estamos apoyando en la parte técnica. Esto se planea realizar para todos los municipios de Bolivia. 

— ¿Cuál es el análisis de los campamentos ?

— Bueno algunos son campamentos que tienen todas las comodidades esenciales para vivir y otra muy diferente es el concepto de asentamientos,  que es lo que hay ahora, donde se colocaron carpas sin servicios básicos de letrinas, baños, lavanderías, luz, agua, etc. Se sugirió a la Alcaldía que reduzca  el número de campamentos y así  distribuir mejor los recursos y mejorar la logística, pero la magnitud inimaginable de más de 6.000 afectados hacen complicado el tema de espacio físico disponible en la ciudad paceña.

La Razón

_

Publicar un comentario

0 Comentarios