Cochabamba: Ocho de cada 10 adolescentes se declaran adictos al celular

Ocho de cada 10 adolescentes de Cochabamba se declararon adictos al celular y no les importa estar en esa condición, revela el  estudio Cultura y Violencia Digital en Cochabamba, elaborado por la Fundación Redes.

El presidente de esa  organización, Eduardo Rojas,  explicó que durante la gestión 2016 se elaboró un estudio sobre el uso del celular entre 700 adolescentes. "Acabamos de concluir el estudio y  ahí se revela que el 80% de los  adolescentes menores de 18 años que están en  edad escolar se declara adicto al celular. Ellos dicen sí soy adicto”, indicó.

Sin embargo,  más allá de eso, lo que preocupa es que a ellos no les importa ese problema. "Dicen ‘y qué’. No es un tema de preocupación real su adicción y eso se vuelve una acción normal para ellos”, precisó.

Celulares y adolescentesOtra  preocupación  es que los  jóvenes no tienen una conciencia de las consecuencias que genera esa patología.

El psicólogo Roger Paz  afirmó que   una  persona es adicta si presenta   los  siguientes síntomas:  no se despega ni un instante del celular, ni para ir al baño, tiene  desesperación cuando se apaga y busca a como dé lugar recargar la batería, duerme junto al celular y  lo usa  mientras se camina o maneja un vehículo.

"De ser así,  es necesario que acuda a un especialista para que sea tratado”, aseguró Paz y destacó que eso afecta al individuo más si el paciente es un niño o adolescente, porque "también se presenta con ansiedad y falta de apetito”. 

Por eso aconsejó que los niños y adolescentes usen el celular  máximo una hora diaria.  

Rojas también explicó que   el estudio Cultura y Violencia Digital en Cochabamba, que se  presentará en los siguientes días, revela también que el 60% de niños de ocho a 11 años ingresó a la unidad educativa con un celular inteligente.

Además que el 70% de los pre adolescentes consultados afirma que sus padres  les dan un celular, pero sin reglas al igual que el  uso de  internet. "Lo que está mostrando que la familia  da   tecnología, pero no está generando hábitos de uso”.

Aseguró que eso se complementa con vacíos en la formación escolar. "Ese es un problema, que  el Ministerio de Educación no está atendiendo de forma cabal esta formación. No tiene idea de cómo asumirá el tema de las nuevas tecnologías dentro del aula. Sospecha del uso del celular, pero deja la metodología abierta a los profesores”, dijo.

La Resolución 01/2017 de Educación, que regula  la gestión educativa, indica que el uso  arbitrario de los celulares "está prohibido”, aunque se aclara que sí podrán ser usadas en aula como parte del nuevo plan curricular.

Según las autoridades educativas, el uso de este aparato o las tabletas se realiza en coordinación entre el maestro y el estudiante, para el uso de aplicaciones educativas.

"No se genera una cultura digital”, según el experto Eduardo Rojas

El presidente de la Fundación Redes, Eduardo Rojas, explicó que debido a que en la familia, las escuelas y el Estado no se dan normas para el uso de las nuevas tecnologías, "en Bolivia no se genera una  cultura digital”.

"Si la familia y las escuelas fallan (en aplicar normas de uso de nuevas  tecnologías), se está configurando el entorno de educación de los niños, de  esa ciudadanía del siglo XXI”, destacó el experto.

Por ello, aseguró que es importante generar nuevos procesos de educación no sólo en las familias, sino en las escuelas, en el entorno global virtual y el Estado.

"Para eso hay que trabajar en educación virtual y eso se produce en un autoaprendizaje para nosotros, pero sobre todo generar oportunidades en la economía digital y conocimientos en esos cuatro campos”, afirmó Rojas.

  De acuerdo con el psicólogo  Roger Paz, es importante la regulación del uso de estos aparatos, porque a largo plazo puede provocar alteraciones en  la salud. "La exposición a la luz blanca del celular provoca insomnio, ya que impide la producción de melatonina, la hormona que regula los ritmos del reloj biológico del descanso”, precisó.

Resaltó que si una persona duerme menos,   conlleva a afectar  el estado físico y mental, por lo que la capacidad de trabajo se reduciría, al igual que  la concentración, la memoria e incluso provoca sobrepeso.

"Por eso es importante que una persona duerma alejado de un aparato electrónico, para que el sueño sea reparador”, destacó.

La elevada  frecuencia en el uso de los celulares también incrementa los niveles de  estrés.

La  constante manipulación de estos dispositivos a su vez puede provocar  afecciones epidemiológicas, por los gérmenes que llevan  adheridos.// Página Siete

_

Publicar un comentario

0 Comentarios