Bolivia está ubicada en el puesto 55 en un ranking de 96 países en los que se midió el
bienestar social y económico de las personas mayores de de edad. Una persona
de 60 años puede esperar vivir con buena salud hasta 15.2 años más.
Si se desagrega este promedio de 55, el país cae hasta un
puesto 78 en “entornos favorables” que implica un alto nivel de discriminación,
maltrato y falta de seguridad para los adultos mayores, según el Índice Global
de Envejecimiento 2015, elaborado por HelpAge International. El informe mide las
variables: “competencias” en educación y empleo, “entornos favorables” sin
discriminación, malos tratos o inseguridad; “seguridad de ingresos” con base en
salarios y/o un sistema de pensiones; y “estado de salud” de los mayores de 60
años en cada uno de los 96 países.
En el caso de los ingresos, Bolivia tiene la tasa de cobertura
de pensiones más alta de la región (95%), pero a la vez una tasa de pobreza en
la vejez importante (30,3%). En el caso del “entorno favorable” la conexión
social de los adultos mayores es la más baja de la región (66%), la seguridad
alcanza al 34% y la satisfacción con el transporte público es del 60%.
En
promedio Bolivia cayó en el lapso de un año de un puesto 51 al 55 en el ranking
general, por encima de Brasil (56), Venezuela (76) y Paraguay (69). En “competencias” adquirió un puesto 37, en
“entornos favorables” el 78, un puesto 59 en “estado de salud” y en “seguridad
de ingresos” el 55.
La esperanza de vida de las personas de 60 años es de 19 años
más por encima de esa edad, y son 15.2 años los que una persona de 60 años puede
esperar vivir con buena salud.
“Bolivia (55) y Brasil (56) –dice el informe– se encuentran en posiciones moderadas en el Índice, a pesar de existir una gran diferencia en ING per cápita entre sí. Brasil logra resultados mucho mejores en seguridad de ingresos (13) que Bolivia (55). Ambos tienen esquemas de pensiones. Bolivia tiene una pensión universal no contributiva llamada Renda Dignidad, la cual le da el puesto de mayor cobertura de pensiones en la región, con el 95%, pero una tasa de pobreza en la vejez del 30,3%, que sugiere que los ingresos por empleo y pensiones no logran satisfacer las necesidades básicas”.
En toda la región la tendencia es que las mujeres se conviertan
en cuidadoras dentro del hogar ocupadas en labores de casa, y que el trabajo
informal proporcione los ingresos principales para las personas que no tienen
acceso a pensiones contributivas. Según el informe, “el papel del Estado es
esencial para establecer, promover e implementar políticas que beneficien a
mujeres y hombres mayores” como factores necesarios para responder al fenómeno
de un rápido envejecimiento de la población.
El propósito de medir el bienestar de la vejez tiene que ver
con que la población de más de 60 años en todos los países del mundo es el grupo
etáreo de mayor crecimiento, un hecho que “afecta de manera profunda nuestra
economía, nuestras formas de vivir y nuestras aspiraciones personales y
profesionales”. Y porque precisamente el nivel de envejecimiento mundial es uno
de los rasgos de éxito de la humanidad, producto de la reducción de las tasas de
fecundidad y el incremento de la esperanza de vida.
Por ejemplo en este 2015, Bolivia cuenta con hasta un 9% de
población comprendida entre los 60 años o más, mientras que para el 2050 esa
población estará entre el 10 al 19% del total en el país.//
PIEB.com.bo
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