Consejos para evitar ser víctima del delito mientras está en la calle

Ésta es la primera columna de la serie sobre seguridad que prepara especialmente para La Razón Digital el analista de seguridad Juan Carlos Galarza Roca. Cada semana se difundirá una columna que busca concienciar que la seguridad también es responsabilidad de cada ciudadano a tiempo que da una serie de consejos para prevenir infortunios. Esta primera entrega trata sobre la prevención en las calles.

Todos los ciudadanos estamos expuestos a riesgos y vulnerabilidades cuando caminamos en las calles, avenidas, pasillos, etc.   Es importante conocer y evaluar algunas situaciones y comportamientos a fin de estar preparados y prevenidos.

Pautas generales

Por lo general, los delincuentes no pueden ser identificados por su vestimenta u otro aspecto físico.  Ante esta situación, es conveniente observar el comportamiento, éste nos puede dar indicios de un potencial ataque.

En caso de sospecha, observar las manos, ojos, y forma de comportarse  (manos en los bolsillos, por ejemplo). 

La forma en que le observan puede ser un indicador. Las victimas no las elijen al azar, normalmente elijen a aquellas más vulnerables, desprevenidas o que llevan  consigo elementos atractivos (joyas, dinero, bolsos,  teléfono celular, entre otros).

Algunas recomendaciones

Evite las calles oscuras, poco concurridas o con lugares donde puedan esconderse para atacarle como: lotes baldíos, vegetación espesa,  etc. También se recomienda tener cuidado en calles excesivamente concurridas o con grandes aglomeraciones.

Cambie sus rutinas de desplazamiento.  Una persona que camine siempre por el mismo lugar y a la misma hora, puede resultar predecible y atractiva para ser asaltada.  Procure caminar en compañía de otra(s) persona(s).

Al caminar, observe todo lo que sucede alrededor suyo, incluso detrás de usted.  Si nota algo sospechoso, conserve la calma y mantenga distancia (unos 20 metros). No permita que el sospechoso se acerque a usted,  recuerde que no asaltan a distancia.

En caso que la persona sospechosa se acerque, puede intentar lo siguiente:

Cambie de acera y siga observando. Si la persona sospechosa también cambia de acera, las posibilidades de que se trate de un asalto aumentan.

Si la persona sospechosa se ha acercado demasiado, busque un lugar concurrido, o donde haya un policía o un guardia, o ingrese en algún local comercial.

Si no hay donde protegerse, cambie la dirección en que camina, alejándose lo más posible del sospechoso, si es necesario corra y pida ayuda.

Por lo general camine en sentido contrario a la ruta de los vehículos, de preferencia hágalo en la parte de la acera más alejada de la calle. (así evita que le aborden desde un vehículo en movimiento).  Si usa un bolso, llévelo en la parte delantera, cruzado, o al lado contrario a la calle.  Evite caminar sobrecargado(a).

Evite tratar con personas extrañas, más aun si están en grupo.

Piense siempre en proteger su vida e integridad física.// La Razón

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