En Bolivia, la calidad de la educación en el puesto 89 de un total de 148 países

Entre 148 países, Bolivia ocupa el puesto 89 en cuanto a la calidad de la educación con un puntaje de 3.4 si se considera que 1 significa que el sistema educativo puede cumplir “nada bien” con las necesidades de una economía competitiva y 7 implica que puede cumplir “extremadamente bien”. El país está situado por encima de otros países de la región sudamericana, donde Paraguay ocupa el último lugar (2.6).

La información complementaria en el tema de la educación superior y capacitación, muestra los siguientes datos que ayudan a tener un perfil más completo de este tema: la calidad de enseñanza en matemáticas y ciencias está en el rango 3.6 (del 1 al 7), la calidad de las escuelas de gestión es de 3.3, el acceso a la red Internet en las escuelas es de 3.5, la disponibilidad de servicios de investigación y formación es de 3.6, y las actividades de formación al personal es de 3.6.

Los datos corresponden al Informe Global de Competitividad 2013-2014 que evalúa 12 categorías consideradas “pilares de la competitividad” en cada país: instituciones, infraestructuras, entorno macroeconómico, salud y educación primaria, educación superior y formación, eficiencia del mercado de bienes, eficiencia del mercado laboral, desarrollo del mercado financiero, preparación tecnológica, tamaño del mercado, sofisticación en materia de negocios e innovación.

Para cada uno de los 12 pilares de competitividad se levantaron encuestas aplicadas a ejecutivos de negocios de todo el mundo. El ítem sobre la calidad de la educación y la capacitación laboral considera a ambos procesos como fundamentales “para las economías que quieren ascender en la cadena de valor más allá de los procesos de producción simples”. El informe argumenta que “la economía globalizada de hoy en día exige a los países fomentar grupos de trabajadores bien educados, capaces de realizar tareas complejas y adaptarse a los cambios con rapidez su entorno y las necesidades cambiantes del sistema productivo”.

En un rango del 1 al 7, la capacidad de innovación de Bolivia está en 3.5, la calidad de las instituciones de investigación científica es de 3.3 (cuando 1 es entre los peores del mundo y 7 entre los mejores), el gasto de la empresa privada en I+D (investigación para el desarrollo) es de 3.5, al igual de la colaboración entre universidad e industria en I+D, y la disponibilidad de científicos e ingenieros está en el rango de 3.8.

El Foro Económico Mundial ha presentado este informe a lo largo de tres décadas, desempeñando la facilitación de este proceso y proporcionando evaluaciones detalladas del potencial productivo de las naciones en todo el mundo. El informe contribuye a la comprensión de los factores clave que determinan que el crecimiento económico y ofrece a los responsables políticos y líderes empresariales una herramienta importante para la formulación de mejores políticas económicas y reformas institucionales. Este año se realizó el seguimiento a 148 economías.// PIEB (BO)

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