La Calle Colón (La Paz, Bolivia)

(Bolivia informa). Calles de la ciudad de La Paz. La calle Colón se encuentra en el centro de la urbe paceña.

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Las calles de Chuquiago: La Colón

l.a calle Colón tiene actualmente una extensión de siete cuadras y, tnediante Ordenanza Municipal de 1950, fue oficialmente nominada como Cristóbal Colón (1440-1506), navegante italiano que, bajo el servicio de la Corona de Castilla, emprendió un largo viaje marítimo tratando de alcanzar una nueva ruta comercial a las Indias, pero en su lugar llegó a la isla de Guanahani, actualmente en Las Bahamas, el 12 de octubre de 1492. Por ello es considerado el descubridor de un nuevo continente —el que más tarde fue denominado América ser el primero en trazar una ruta de ida y vuelta a través del océano Atlántico y dar a conocer esta noticia. Este hecho impulsó decisivamente la expansión mundial de la civilización europea, gracias a la conquista y colonización que varias potencias de dicho continente llevaron a cabo en América.

En años de la colonia, las cuadras de esta vía tuvieron distintos nombres. Entre las cuadras sexta y séptima, hacia 1755, vivió el limeño Maestre de Campo, Caballero Veinticuatro, Pedro de Fernández San Martín, quien dijo: "Quiero gozar del sol de La Paz antes de morir", por lo cual esta sección fue nombrada calle San Martín.

La quinta cuadra originariamente fue conocida como la calle de las Morcillas, convirtiéndose más tarde en la calle de las Teresas y finalmente fue denominada calle del Carmen por la construcción del convento homónimo, fundado en 1718 como antiguo monasterio carmelita, que ocupaba una manzana íntegra en terrenos comprados y otros cedidos. En este lugar se venera a "Nuestra Señora del Carmen", patrona de la ciudad de La Paz. La fachada del templo data del siglo XVIII, y cuenta sólo con una nave con cañón corrido. Llama la atención el altar mayor, todo cubierto de una capa de plata cincelada del más puro estilo barroco. Su portada de piedra caliza fue realizada junto con la de Santo Domingo.

El día 16 dejulio de 1809, de esta iglesia salió, como era costumbre, la procesión de la Virgen del Carmen. Como lo habían planeado los revolucionarios, aquella fue la señal que dio comienzo a la gran revolución. En esta iglesia, el 30 de julio de 1809, los revolucionarios ofrecieron un sermón para nombrar a la virgen "Patrona del Ejército Patriota" (patronazgo que mantiene hasta hoy en día). Sometida la revolución, el obispo Remigio La Santa, lacayo tonsurado de la causa realista, organizó proceso contra la imagen, señalándola como a "reo de rebelión". Asimismo, en la iglesia del Carmen fueron enterrados los restos mortales del patriota Mariano Graneros, después de que ejecutado juntamente con los principales cabecillas de la Revolución Julia, en la plaza de Armas (hoy plaza Murillo) el 29 de enero de 1810.

La cuarta cuadra fue nombrada calle La Merced, dada la construcción del convento homónimo fundado en 1570 y construido en forma de cruz latina.

En 1830, se trabajaron los actuale altares bajo diseños del padre Manue Sanauja, así como la cúpula que era en sus tiempos una de las mejores de la ciudad. Su diseño cuenta con cubierta estructurada con cañón en la nave principal, cúpula en el crucero, bóvedas en las naves laterales, así como portada en piedra tallada de estilo barroco simple. Se estrenó con gran pompa el 2 de febrero de 1832. En el atrio de este convento se encontraba un cementerio al igual que en muchos templos, donde se instaló el antiguo mercado de Flores y actualmente se encuentra la plaza Obispo Bosque. En esta iglesia yacen los restos mortales de los patriotas Basilio Catacora y Buenaventura Bueno.

Antiguamente, el convento ocupaba toda la manzana, pero durante el gobierno de Mariano Melgarejo, se destinó el piso superior a los religiosos y el inferior a los soldados y, a partir de entonces, ambos grupos hacían vida en común. De esta época data justamente la existencia del padre Lorenzo Salcedo, conocido como Khori Sunka (bigote de oro), un religioso que sobresalió por bondad innata. Se cuenta de fray Lorenzo que cierto día que paseaba por los corredores notó que en el cuartel había mucha agitación. De improviso, una mujer se le arrodilló a sus pies implorando con lágrimas que intercediera por un hombre condenado a cientos de azotes por haber caído en delito de deserción.

El padre Lorenzo habló con el jefe del regimiento y le pidió que en nombre de la Santísima Virgen perdonara al soldado. El militar respondió que nada tenía que ver la Virgen con los asuntos de la disciplina cuartelaría. Viendo inútiles sus esfuerzos el fraile remangó sus sotanas, se tendió en el suelo y pidió que sobre él cayeran los azotes destinados al desertor. Consternados, el cabo detuvo el castigo y el jefe levantó al sacerdote diciendo: "Por su heroica decisión queda perdonado el soldado'.'

En la cuarta cuadra, frente a la iglesia de La Merced, se encontraba el billar (sitio donde actualmente se encuentra el ex Banco Minero) del patriota Mariano Graneros. Se trataba de una de las vías más frecuentadas y vinculadas para reunir a los revolucionarios hasta altas horas. Cordero, Arias, Landaeta, Aparicio y Jiménez, son los apellidos de los patriotas que se encontraban reunidos en ese billar el 16 de julio, desde donde salieron a la toma del cuartel realista para iniciar la revolución.

La tercera y segunda cuadra de la calle Colón tuvieron el nombre de calle de la Placa, ya que esta vía dirigía a un puente conocido con ese denominativo, mandado a construir con varias "placas" de metal en 1852 y que por su mala construcción dio lugar a su demolición en 1872. Fue reconstruido bajo  ión (lel  to leon,jrdo lanza en 18/4 reemplazado por do fierro en uropa, que fue emplazado y tue conocido con el nombro do puente

Según la tradición, se cuenta que en ja segundo cuadra existió una alquilada a un vidente, Cuando so propuso descansar en la pórryera 000», d vidente sintió una presencia vaga quo deambulaba por la e,ornbra do la llevaba un amplio sombrero y una antigua capa, Este espectro se le lecho y tomándole suavemente un brazo le mostró el muro en ej que una franja O luz tenue y rojiza ondulaba. Desde entonces, todas las noches se fue repitiendo ea escena hasta que un día, a pesar del terror que sentía, el vidente se armó de valory preguntó al fantasma qué quería, y éste le dijo: "Buscada//í, encontrareis un tesoro, Hay que derribar este muro, apartar dos grandes piedras, luego hallaréie, el esqueleto de un niño recién nacido; sigue escarbando, después encontrareie, tres ee,colone€, que conducen a un sótano, donde se encuentra el tesoro. Atrévete, no seáis tonto".

El vidente contó su secreto a gente crédula y se formó una especie de socíedd anónima. Así una noche, el fantasma se presentó ante el grupo, aterrorizado, y k dijo al vidente: "ya tú me conoces; ya te lo he dicho todo. Tú sobéis el sitio donded tesoro se esconde. Atrévete, no seáis tonto'.' Después que se retiró el espectro, el grup comenzó los trabajos en busca del tesoro y, prontamente, encontraron las ús piedras, los restos del niño recién nacido, los escalones y la abertura del escondite El boquete negro inspiró temor en los presentes, pero dos sujetos se aventurum y comenzó el descenso. No pasó mucho tiempo hasta que estos sujetos casi asfixiados por los gases que se desprendían del interior del sótano. Volvkm pálidos y sin aliento y después de ellos nadie se atrevió a continuar la erng3 Alarmado el dueño de casa ordenó que en seguida se clausurara el boquete, de su casa a los intrusos y desahució al inquilino.

En tiempos coloniales la extensión de esta vía fue de seis cuadras y la prírrera fue la calle de la Placa; actualmente, la primera cuadra se ha consolidado entubamiento del río Choqueyapu, la construcción de la avenida Camacho Yb apertura de la avenida Mariscal Santa Cruz en la primera mitad del siglo XX.

Es la calle Colón una de tantas vías de nuestra ciudad que encierra historíaSY tradiciones que no deben ser olvidadas. En su recorrido aún se pueden apreõ construcciones que datan de los primeros años de la República, que invitan paceños a recorrer esta vía y recordar su pasado e historia.// R.C.G.

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