En Bolivia, el 17 por ciento de la comunidad internauta (personas mayores de 14 años con acceso a Internet), usa la banca electrónica para realizar consultas sobre su consulta de saldos y movimientos en su cuenta. Sin embargo, ese pequeño porcentaje, asegura que su vida se facilitó al incluir estas operaciones en su vida cotidiana.
Según las personas que utilizan la banca digital, sus negocios han mejorado y experimentan otra dimensión comercial e invitan a sumarse a esta experiencia. También hay voces críticas que aseguran que pese a los esfuerzos que se han realizado en el país, Bolivia "continúa en pañales" en con relación a otros países.
Según los datos de la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban), en base al reporte del Banco Central de Bolivia (BCB), entre enero y julio de 2017 se realizaron 2,1 millones de operaciones de bajo valor (tarjetas, billetera móvil, servired y cámara de compensación automatizada), 25 por ciento más con relación al mismo periodo de 2016.
En ese sentido, según el secretario ejecutivo de Asoban, Nelson Villalobos, las entidades financieras desarrollaron soluciones innovadoras en el campo de la banca digital. “Los niveles de uso de estos servicios aún son bajos, debido en algunos casos por el temor que provoca el desconocimiento de estas nuevas formas de relacionarse con el banco, además de las susceptibilidades en torno a la seguridad”, afirmó Villalobos.
Un estudio de la Agencia de Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación (Agetic), en un levantamiento de una encuesta que se realizó a fines de 2016 en 10 ciudades capitales, 20 intermedias, 21 centros poblados y 34 localidades rurales, devela que dos tercios de las transacciones en Bolivia se realizan a través de tarjetas de débito y el resto, en tarjetas de crédito, lo que da una señal clara de que ya se incursiona en el mundo digital.
Villalobos indica que a pesar de los problemas con la velocidad del Internet, las entidades financieras están realizando “importantes esfuerzos e inversiones” con el fin de lograr una mayor incidencia de la banca digital.
“El volumen de los recursos dedicados a este fin corresponde a un importante porcentaje de sus presupuestos, ya que son inversiones de carácter estratégico. Los bancos hoy en día son conscientes de que el usuario financiero prefiere cada vez más utilizar los servicios que se brindan a través de canales digitales”, sostiene.
Desafíos
Para Giorgio Trettenero, secretario general de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), citado en una nota de prensa, el desafío es pasar banca tradicional a la digital integral. “Nuestra banca tiene la oportunidad de abrir nuevos mercados, ampliar la inclusión financiera y reducir costos”, afirma.
Por su parte, Villalobos asegura que el desafío en Bolivia es trabajar en la normativa del comercio electrónico y otros avances en materia de servicios digitales en los mercados financieros.
“El reto es promover una regulación que impulse la profundización de la banca digital con mayor flexibilidad y, sobre todo, agilidad de implementación, ya que de otro modo se posterga la innovación y con ello muchas oportunidades de inclusión y mejora en servicios”, explica.
En ese sentido, añade que las iniciativas tecnológicas implementadas están a la par de los de la región, así como las actividades que se realizan para lograr una rápida adaptación de las nuevas tecnologías e innovaciones, con el objetivo de llegar a la instauración de una banca digital plena.
Inclusión financiera
Según los datos de Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), en su último reporte a junio de 2017, en todo el país existen 28 municipios con alta cobertura de los servicios financieros. En 61 municipios hay mediana cobertura, en 80 baja y en 170 municipios aún hay nula cobertura de servicios financieros.
"La calidad del servicio de Internet (…) incide en los bajos niveles de uso de los servicios de banca digital"
Regulación
Según la Felaban, es necesaria la regulación de las transacciones en línea, pero no debe apagar la innovación. Deben establecerse estándares globales. La industria no puede prosperar en un entorno regulatorio fragmentado.
Ciberseguridad
La ciberdelincuencia es una amenaza que avanza rápidamente, pero las instituciones regionales siguen ignorándola, según Felaban. En ese sentido, la banca necesita reaccionar rápidamente y prepararse de manera adecuada.
Moneda virtual
Son el futuro, y ya se ven de muchas formas, tales como tarjetas de fidelización, millas de viajero frecuente, programas de recompensa y tarjetas corporativas de prepago. Los métodos alternativos coexistirán con dinero real.// La Prensa
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