Suspense, remontada y rumbo a cuartos. El Barça sacó adelante los octavos de final de la Liga de Campeones con fútbol y con justicia, al remontar la eliminatoria de octavos ante el Arsenal en el Camp Nou (3-1, 4-3 en total) en un encuentro de vuelta que encarriló Leo Messi al filo del descanso, que complicó sobremanera Busquets con un tanto en propia puerta, en la segunda parte, y que Xavi y Messi supieron arreglar en apenas tres minutos. Todo al más puro estilo Barça.
Guardiola, que llegaba al encuentro con las bajas de Piqué y Puyol, necesitaba enmendar el 2-1 encajado en el Emirates y se topó de inicio con el mejor Arsenal (por nombres), pese a las tretas de Wenger y sus 'tocados' (Van Persie, Fábregas y Wilshere fueron titulares). Pero de nada sirvió, solo hubo Barça, Cesc cuajó un pésimo primer partido en feudo culé (acabó tocado y sustituido) y el Arsenal no tiró a puerta en los 90 minutos.
La primera parte fue un monólogo azulgrana, fruto de una presión muy intensa. Los 'gunners' fijaban la línea defensiva lejos del área de Sczesny -mejor alejar el mal, que tenerlo en el rellano- y tocaba cruzar los dedos. Lo cierto es que Djorou y Koscielny, la pareja de centrales visitante, cuajaron un gran papel y, las llegadas del Barça en triangulación o en excesiva conducción de Messi, no atinaban a superar a la dupla.
La mala suerte se cebaría con el Arsenal superado el primer cuarto de hora, en un disparo de Alves en una falta lejana que significaba el primer lanzamiento entre los tres palos. No hubo gol, pero sí lesión de Sczesny en su mano, que tuvo que dejar su lugar a Almunia, el mejor del Arsenal.
Los minutos se sucedían y el escudo del Arsenal resistía a la posesión y a los envites de Messi. Wilshere, Diaby y Sagna peleaban sin límites, mientras Cesc no encontraba su sitio y bajaba los brazos. Superada la media hora, los 'gunners' habían interiorizado que la contra era el único recurso y 'La Pulga' reclamaba un posible penalti tras ser derribado por Diaby sobre la línea del área.
Pasaban los minutos y valía la pena rescatar un disparo de Adriano al palo derecho de Almunia, tras una llegada por la banda izquierda, antes de que Messi presagiara el primer tanto con otra larga conducción entre adversario que acabó en las manos del meta español.
Sí, siempre Messi, pero tuvo que aparecer Iniesta al tercer minuto de tiempo añadido para ponerle un pase medido al argentino entre líneas, superar con un sombrero a Almunia en su salida y lograr a un toque el primero de la noche. Todo precedido de un error de un taconazo de Cesc a ninguna parte cerca de su área.
Miedo y reacción
Y como ya ocurriera en Londres, el Barça no cerró el partido rápidamente y el Arsenal volvío a buscar petroleo en balones imposibles sobre Nasri... Bingo, en ocho minutos: el francés sacó un córner y Busquets se lo remató en su portería. Castigo y leve recuerdo.
El tanto propulsó al equipo inglés al instante, que se veía en cuartos sin querer, pero que vio truncado dicho ramalazo con la segunda amarilla a Van Persie por disparar a puerta cuando Busacca había parado el juego. Error de novato y, quizá, castigo severo del colegiado.
El Barça arrasaba con su juego, pero pecaba en su empeño de romper por el centro y que no sabía como tumbar a Almunia (Villa probó su serenidad en dos ocasiones). Tuvo que volver a aparecer Iniesta de desatascador, casi invisible todo el partido (salvo en los goles), para meter otro balón medido al asturiano, que de primeras dejó a Xavi y éste sí supo batir a Almunia en el mano a mano. Olía a prórroga y a libertad.
Destrozado el freno de mano, tocaba golpear de seguido, al dedillo, de carrerilla. Así, tres minutos más tarde y con el Barça volcado, Pedro fue derribado dentro del área por Koscielny y Messi consiguió el tanto desde el punto el punto de penalti.
Ahí estaban los cuartos y la sensación de imponer una vez más el fútbol a los milagros, pero la sentencia no llegaba ante un Almunia sensacional y el recién incorporado Bendtner llegaba en carrera solo ante Valdés, en un mano a mano. Suerte que Mascherano pasaba por allí, porque significaba el adiós... Problema resuelto y nuevo reto.
Ficha técnica
3 - Barcelona: Valdés; Alves, Busquets, Abidal, Adriano (Maxwell, m.90); Mascherano (Keita, m.88), Xavi, Iniesta; Pedro, Messi y Villa (Afellay, m.82)
1 - Arsenal: Szczesny (Almunia, m.19); Sagna, Djorou, Koscielny, Clichy; Wilshere, Diaby; Cesc (Bendtner, m.78), Rosicky (Arshavin, m.73), Nasri; y Van Persie.
Goles: 1-0, m.45+3: Messi. 1-1, m. 53: Busquets (propia puerta). 2-1, m.68: Xavi. 3-1, m. 71: Messi.
Árbitro: Massimo Busaca (Suiza). Mostró cartulina amarilla a Koscielny (m.16), Sagna (m.29), Wilshere (m.36), Van Persie (m.45+1), a quien expulsó por doble amonestación en el minuto 56.
Incidencias: Asistieron al encuentro 95.486 espectadores en partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones disputado en el Camp Nou.
Vía: 20 Minutos
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